El fútbol croata es, actualmente, una fábrica interminable de producir mediocentros que destacan por su extraordinaria calidad técnica. A los Modric, Kovacic, Brozovic o Rakitic en la última década hay que añadir a Lovro Majer, centrocampista del Rennes de 23 años que se dio a conocer en Francia el pasado domingo con una exhibición ante nada más y nada menos que el Olympique de Lyon, siendo el jugador más destacado en la goleada de los de Genésio a los de Bosz por 4-0.
Majer, admirador de Modric (de hecho, existe una foto en la que Majer sale al campo de la mano de Modric hace diez años antes de un partido de Croacia), fichó en verano por el Rennes a cambio de 12 millones de € tras haber brillado en el Dinamo de Zagreb y, aunque le costó arrancar en Francia, el centrocampista se ha convertido en una pieza clave del conjunto bretón, que aspira a terminar la Ligue 1 entre los tres primeros clasificados.
Zurdo, elegante y con la cabeza siempre levantada, Majer es el último producto croata que aspira a ser el relevo de Modric a corto plazo en la selección. Ya ha sido convocado con la absoluta de Croacia y también ha debutado, por lo que su salto a la Ligue 1 le puede consolidar definitivamente en los planes de Zlatko Dalić. Majer es, sin duda, uno de los mayores talentos balcánicos del último lustro, habiéndose anticipado el Rennes a grandes clubes europeos que pujaron por el canterano del Lokomotiv de Zagreb el pasado verano.