El fútbol es justo con Modric

Modric no fallará a su cita con el Mundial. La subcampeona del mundo se clasificó para Qatar no sin sufrimiento, en un partido que dominó de cabo a rabo y que debió solventar mucho antes del gol en propia meta de Kudryashov. El lateral ruso, a falta de diez minutos, marcó el tanto que sepultó las opciones de su país, al que le valía un empate para lograr el objetivo.

Antes de eso, y después, todo lo que pasó en el encuentro lo protagonizó Croacia. De cabo a rabo llevó las riendas del choque y tuvo en Modric y Brozovic a los canalizadores del juego. El peligro vino por las bandas, con los centros laterales maravillosos de Sosa y sobre todo Juranovic. Uno de ellos casi lo aprovechó Kramaric con un cabezazo muy centrado que salvó Safonov. El peculiar portero ruso fue sometido a un bombardeo. Por los costados y desde fuera del área lo intentó Croacia en todo momento. Fue un milagro que el marcador no se alterase en esos instantes.

El paso del tiempo recrudeció el estado del césped. La lluvia incesante convirtió el escenario en un lugar casi con tintes épicos. El que lograra la clasificación lo haría bajo unas circunstancias inigualables para una gesta. Karpin, bastante superado durante todo el choque, metió un central más y fue retirando a sus desaparecidos artistas, en especial Golovin. La respuesta de Dalic fue meter a otro punta, Petkovic, y él área se convirtió en un vagón de metro en hora punta. Imposible ver mas gente por allí deambulando.

Rusia no tenía más intención que achicar agua y salir como pudiera de aquel asedio. Sin embargo, cuando parecía que el destino le premiaría sin merecerlo, un centro de Sosa, uno más, lo remató sin querer Kudryashov en propia puerta para éxtasis del público croata y decepción de Karpin y los suyos. Croacia estará en el Mundial, su sexto de los últimos siete. Un premio para su ambición y la de Modric, líder también en Qatar cuando llegue a la cita con 37 años…