Holanda pasa de decepción a favorita en sólo seis días

Holanda ha vivido las dos caras del fútbol en sólo seis días. Llegó al Mundial como una de las grandes favoritas al título después de ganar con apabullante autoridad la última Eurocopa de la categoría (4-2 a Italia en la final). Sin embargo, sus dos primeros partidos fueron una decepción: derrotas ante Japón (0-3) y Senegal (1-3). Eso les dejó al borde del abismo, necesitando un milagro para pasar a la siguiente fase. Debía golear a Estados Unidos y esperar a otros resultados para acceder como una de las cuatro mejores terceras. Cumplió su parte (4-0 a los americanos) y la carambola se completó con el resto de marcadores.

En octavos les tocó Nigeria, una de las favoritas. Pero Holanda ya no era la de los dos primeros partidos. Esos fantasmas quedaron atrás y regresó la máquina perfecta que asombró en Europa hace unos meses: 3-1 a los africanos con un fútbol vistoso. El gran héroe fue Hansen, que con su hat-trick (el último de penalti) lideró a la Oranje. Se adelantaron pronto los holandeses (en el 3’), empató igual de pronto Nigeria (12’) y contestó Holanda más rápido aún (15’). La locura de goles se paró después y los nigerianos tuvieron sus opciones hasta que en el 80’ avisaron al árbitro de una posible mano en el área de Nigeria. Después de revisarlo en la pantalla, el colegiado señaló la pena máxima y Hansen no falló para poner la guinda a su noche soñada. Ahora, Holanda se enfrentará al vencedor del Italia-Paraguay.

COREA DEL SUR, TAMBIÉN A CUARTOS

En el otro partido de octavos, Corea del Sur derrotó a Angola por la mínima (1-0). Los asiáticos se adelantaron a la media hora de partido y supieron defender ese resultado. Sufrieron especialmente en el descuento de la segunda mitad, donde los africanos tuvieron tres ocasiones consecutivas que aún cuesta creer que no terminasen en gol. Resistió Corea del Sur y ya espera rival en cuartos: saldrá del Japón-México.