España se enfrenta a Italia en uno de los cruces de los octavos de final de la Eurocopa en el estadio de Saint Denis y el equipo de Del Bosque tendrá que echar mano de todo lo que tiene a su alcance si quiere seguir con vida en este torneo. Desde que el equipo aterrizó en la Isla de Ré cada uno de sus integrantes ha ido cumpliendo religiosamente con los rituales particulares y colectivos acuñados en los momento del triunfo con España o con sus respectivos clubes.
Es común una determinada ropa interior, un amuleto, un corte de pelo, comer el mismo menú, hacer la llamada al familiar y amigo que transmite buen ‘feeling’… Así hasta un millón de pequeños detalles que forman parte de la parafernalia que engloba un partido de fútbol y, por ende, un torneo de gran calibre.
A la expedición española se ha unido un nuevo miembro. Se trata de un llamativo bulldog francés rojo de escayola que convive con los jugadores en el hall del hotel que ocupa España en la Isla de Ré. Sergio Ramos fue el primero en apadrinarle y quedó bautizado como Sergio. Del Bosque precisa de la magia del bulldog francés rojo y de sus protectores para doblegar al correoso once que presentará el seleccionador italiano, Antonio Conte.