La vacuna de los jugadores de la selección española ha generado debate. Los futbolistas de Luis Enrique recibirán su dosis sin estar dentro del grupo de edad correspondiente, como ya hicieran los integrantes del equipo olímpico español.
Sin embargo, se ha generado cierta polémica por la inoculación de las vacunas a los jugadores de la Roja, algo que no ocurrió cuando los integrantes de equipo olímpico español fueron vacunados, Una indignación que tiene un trasfondo y una versión de cada parte.
Tanto el Comité Olímpico Español como la Real Federación Española de Fútbol solicitaron al Gobierno de España la vacunación de los integrantes de sus elecciones en abril. La insistencia del presidente del COE, Alejandro Blanco, fue crucial para la concesión.
Así, y tal y como confirman a Sportyou/20minutos.es fuentes del Comité Olímpico Español: “Alejandro Blanco insistió para que la vacuna llegara a los olímpicos y se llegó a un acuerdo”, ratificado en la rueda de prensa conjunta entre el presidente del COE, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, el ministro de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, y Margarita Robles, ministra de Defensa.
🎙️ Alejandro Blanco (@COE_Presidente) responde a la pregunta de @lydikit.
“Habrá vacuna para todo aquel que quiera vacunarse antes de #Tokyo2020”.— Comité Olímpico Español (@COE_es) April 14, 2021
El relato del organismo olímpico español es que solicitaron la vacunación meses atrás, aunque en su momento el Gobierno les emplazó a que la población de más riesgo estuviera vacunada, cosa que pasó. Por lo tanto, y con la colaboración del Ministerio de Defensa, los deportistas fueron vacunados,
El agravio comparativo llega cuando, desde la Real Federación Española de Fútbol, explican que la vacunación se solicitó hace dos meses, en abril, y la respuesta no fue la misma.
En declaraciones a este medio, la RFEF sostiene que se pidió la vacunación, pero la respuesta fue negativa, y que se vacunó a los jugadores susceptibles de ir a a los Juegos, caso de Marco Asensio, antes que los de la absoluta, sin conocerse la convocatoria.