Carlos Alberto Parreira ya sería una leyenda del fútbol sólo con lo que hizo en el Mundial de EEUU en 1994. Lideró a Brasil a su cuarta Copa del Mundo tras una larga sequía de 24 años sin ganarla. El último título de la canarinha había sido en México 1970, con aquella maravillosa selección liderada por Pelé, Rivellino, Gérson, Tostão y compañía, donde también estaba Parreira, como preparador físico.
Si el sueño de cualquiera que trabaja con el fútbol es poder estar en un Mundial, Parreira ya podría considerarse más que privilegiado con estas dos experiencias. Ha probado la victoria en dos ocasiones. Pero el récord alcanzado por él en Sudáfrica 2010 le separa todavía más de sus compañeros que un día pudieron estar en la cita más importante que tiene el fútbol: ha sido seleccionador de selecciones mundialistas en seis ocasiones.
Además de las dos experiencias como entrenador de Brasil (1994 y 2006), el brasileño fue técnico de Kuwait en España 1982, de Emiratos en Italia 1990 y de Arabia Saudí en Francia 1998, antes de asumir el banquillo de la selección anfitriona en 2010 y superar al serbio Bora Milutinovic, que ha estado en cinco Mundiales.
Paradójicamente, en las cuatro oportunidades mundialistas que tuvo fuera de Brasil, Parreira nunca logró superar la primera ronda.