Si el siglo pasado está lleno de ejemplos de selecciones que repitieron finales en Mundiales de fútbol de manera consecutiva (Brasil, Holanda, Argentina, Italia y Alemania lo consiguieron), la llegada del siglo XXI ha hecho que ningún equipo repita participación.
Después de la gloria de alzarse con la Copa, toca una travesía del desierto, como bien está comprobando España. Algunos lograron prolongar su hegemonía en los torneos continentales (Francia y España), pero en el siguiente Mundial toca descalabro del campeón. Le pasó a los galos, que cayeron con estrépito en la primera fase en 2002, a Brasil (cuartos en 2006), a Italia (primera ronda en 2010) y a España (también primera fase en 2014).
España, tras la debacle mundialista, está buscando su identidad mientras suma derrotas dolorosas cada vez que se encuentra con un rival de entidad. ¿Cómo les fue a esos anteriores campeones del mundo? ¿Volvieron a estar entre las grandes selecciones del mundo?:
Francia: Tras ganar el Mundial de 1998 y la Eurocopa de 2000, en Corea y Japón la generación liderada por Zinedine Zidane tocó fondo con su eliminación en primera ronda en 2002. Sin embargo, los Zizou, Henry, Trezeguet, Abidal y compañía siguieron dando guerra varios torneos más, alcanzando las semifinales en la Euro 2004 y la final mundialista en 2006.
La gran Francia no ha vuelto desde la retirada de su generación de oro. Pese a contar con buenos jugadores, sus participaciones se cuentan por decepciones: primera ronda en la Euro de 2008 y el Mundial de 2010 (con motín y guerra entre jugadores y el seleccionador Raymond Domenech) y cuartos en la Euro de 2012.
Los cuartos de final del pasado Mundial son un indicio de recuperación, y valores como Benzema, Griezmann, Pogba y Varane cotizan al alza, pero aún les falta brillar en una gran competición.
Brasil. Llega a cada torneo como una de las grandes favoritas, llegue con una generación mejor o peor. En 2002, pese a las dudas que envolvían su juego, los goles de Ronaldo le dieron la quinta Copa del Mundo, última de su palmarés.
Las decepciones marcan su trayectoria desde entonces. En 2006 y 2010 no superaron los cuartos de final, pero sin duda el mayor fracaso es el del pasado Mundial, en el que jugaban en casa. Las semifinales son un buen resultado para casi cualquier equipo, pero no para la ‘canarinha’, y menos tal y como se produjo, cayendo por 1-7 ante Alemania.
Italia: Una defensa infranqueable liderada por Cannavaro, sorprendente Balón de Oro del torneo, dio a la azzurra su cuarto Mundial en 2006. Desde entonces, solo un espejismo, la final de la Eurocopa de 2012 (con derrota contundente ante España por 4-0), el resto decepciones y una búsqueda interminable de la identidad del equipo, que se debate entre su estilo tradicional de catenaccio y un intento de hacer una apuesta por el buen fútbol que solo funciona a coletazos.
España: Después de su primer Mundial, llegó su segunda Eurocopa consecutiva en 2012. Desde entonces, la Roja no levanta cabeza y a su debacle mundialista hay que sumar su mal papel posterior, con derrotas en amistosos ante Francia, Alemania y Holanda y en fase de clasificación ante Eslovaquia. ¿Cuánto tardará la selección española en volver a codearse con la élite?